Atresmedia es el gigante local del mercado de servicios de libre transmisión, u «over-the-top», (OTT) en España. A pesar de la fuerte presencia de competidores de todo el mundo, ATRESplayer se ha convertido en la plataforma de streaming más popular, tanto en número de usuarios como en horas de visionado. Todo ello, gracias a su estrategia de ofrecer contenido de calidad creado específicamente para el público español.

Como explica Miguel Rodríguez, jefe de proyecto de TI en Atresmedia, para mantener la posición de liderazgo en el mercado se necesita algo más que contenido: “Nos hemos comprometido a ofrecer a los clientes la mejor experiencia de usuario posible. Esto significa estar siempre al acecho de nuevas formas de mejorar la escalabilidad, la resiliencia y el “time-to-market” de nuevas funciones. Cuando vimos que nuestra arquitectura de aplicaciones monolíticas no era suficiente, supimos que teníamos que hacer algo”.

Esta arquitectura monolítica impedía que la solución de gestión de contenidos de Atresmedia operara de forma rentable en lo que a tiempo y costes se refiere. Además, la limitada escalabilidad dificultaba que la plataforma de streaming pudiera asumir los picos de demanda de retransmisiones en directo que generaban un elevado tráfico. Sin embargo, la desfasada arquitectura no solo afectaba al streaming, sino que también provocaba problemas similares en otras áreas. Durante las elecciones generales, Atresmedia hizo un seguimiento del proceso electoral en directo, ofreciendo el recuento de votos en tiempo real en sus diferentes sitios web. Este tipo de coberturas genera un inmenso tráfico en un periodo de tiempo muy corto, lo que exige una gran escalabilidad que la arquitectura existente no podía prestar.

Ante la pujanza del streaming de contenido y la inminente llegada de las elecciones generales de 2019, Atresmedia se apresuró a modernizar su arquitectura backend. Tras una serie de pruebas de concepto, la opción que se consideró más apropiada fue cambiar a una arquitectura de microservicios con Kubernetes. Gracias a la tecnología de contenedores, los microservicios brindaban a Atresmedia la flexibilidad, la resiliencia y la facilidad de gestión que el grupo buscaba. De entre todos los proyectos orientados a microservicios que probó Atresmedia, Kubernetes ofreció los mejores resultados, así como la ventaja añadida de un soporte técnico de la comunidad a gran escala. El objetivo estaba claro. A Atresmedia solo le quedaba colaborar con un socio experto para llevar a la práctica su visión de Kubernetes.

Solución

Atresmedia no tardó en escoger un socio de implementación y distribución de Kubernetes. Las pruebas piloto no dejaron lugar a dudas: Charmed Kubernetes de Canonical ofrecía el mayor grado de agilidad y automatización de procesos con una rentabilidad sin precedentes. “Llevamos usando Ubuntu para la codificación y la transcodificación de vídeo desde 2011”, apunta Miguel Rodríguez. “Sabíamos que, con Canonical, estaríamos en manos de profesionales”.

A través de Juju, la herramienta de gestión de ciclo de vida del operador de Charmed, Canonical ayudó a Atresmedia a automatizar el despliegue, la operación y el escalado de su nuevo clúster de Charmed Kubernetes, lo que permitió una implementación de la solución sin fallos y una drástica simplificación de la gestión de aplicaciones existente. Además, gracias a Juju, Atresmedia pudo desplegar fácilmente Charmed Kubernetes y ejecutar aplicaciones nativas de la nube tanto en el entorno local como en la nube, un requisito imprescindible dada la estrategia multi-cloud del grupo empresarial.

En un principio, Atresmedia contrató el soporte técnico de Canonical para operaciones rutinarias. Sin embargo, desde su implementación, el equipo interno de TI ha adquirido los conocimientos necesarios para mantener el clúster por su cuenta. Canonical sigue a su disposición para resolver cualquier problema importante que pueda surgir, aunque, tras cuatro años, no se ha registrado ni un solo incidente significativo.

Óscar Martínez, responsable de arquitectura y desarrollo backend de Atresmedia, afirma: “Siempre procuramos tener autonomía, así que nos gustó mucho la idea de no atarnos a un servicio de consultoría. Ahora que tenemos el conocimiento interno, la utilidad de Juju es incalculable. Nos ofrece una gran agilidad a la hora de actualizar o modificar el clúster”.

Resultados

Con la implementación de Charmed Kubernetes, la resiliencia y el «time-to-market» son del máximo nivel y, lo que es más importante, la escalabilidad ha dejado de ser una fuente de problemas. Cuando aumenta considerablemente el tráfico de ATRESplayer, el sistema lo escala para poder gestionarlo, lo que garantiza una experiencia de visionado perfecta a todos los usuarios. Durante las elecciones generales de 2019, cientos de miles de ciudadanos pudieron seguir el recuento de votos en tiempo real en tres sitios web distintos de Atresmedia sin ningún problema.

En palabras de Miguel Rodríguez, “si no hubiéramos logrado gestionar el tráfico y ofrecer datos actualizados durante las elecciones, nuestra competitividad se habría visto gravemente perjudicada. Pero Charmed Kubernetes nos ofreció justo lo que necesitábamos e hizo que la escalabilidad no fuera un problema”.

La amplia automatización que permite la nueva arquitectura y las herramientas de Canonical también se ha traducido en un ahorro de costes, con una gestión de aplicaciones sencilla gracias a que Juju no requiere incontables horas de mantenimiento manual. “No nos arrepentimos de haber escogido Canonical”, concluye Martínez. “La implementación de Kubernetes con Juju ha sido una gran experiencia y estamos deseando seguir creciendo con esta herramienta”.

“Si no hubiéramos logrado gestionar el tráfico y ofrecer datos actualizados durante las elecciones, nuestra competitividad se habría visto gravemente perjudicada. Pero Charmed Kubernetes nos ofreció justo lo que necesitábamos e hizo que la escalabilidad no fuera un problema”, señala Rodríguez.